“Son tiempos donde todos están contra todos, donde nadie escucha nadie, tiempos egoístas y mezquinos donde siempre estamos solos” Fito Páez

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miércoles, 4 de julio de 2012

El amor a la vida, clave del nuevo paradigma social


José Luis Sampedro, en el discurso pronunciado el pasado 24 de mayo, con motivo de su nombramiento de doctor honoris causa por la Universidad de Alcalá de Henares, recordaba que el referente total para orientar el nuevo orden social es el amor a la vida.
Previamente, define la realidad actual, con palabras de A. Gramsci, como ese momento de tensión y contradicción “cuando lo viejo no acaba de morir, cuando lo nuevo no acaba de nacer”, queriendo señalar que el actual orden capitalista se hunde, que la economía de libre mercado se está muriendo, que la política representativa no sirve… como han puesto de manifiesto los jóvenes indignados, al tiempo que afirma que esas instituciones del viejo capitalismo mueren sin tener referentes que ofrecer para construir el nuevo orden, pues son incapaces de ver algo más allá del dinero.  Sus propuestas, sus medidas para salir de la crisis es ganar más dinero para acumular más poder; acumular poder para ganar más dinero.
Ve las causas de ese agotamiento del actual modelo en los grandes y profundos cambios que se vienen produciendo, y que presentan ciertas similitudes con los que pusieron fin a la Edad Media y posibilitaron el nacimiento del capitalismo. Si entonces actuaron como detonantes la pólvora, las nuevas energías (vapor…), los nuevos medios de transporte que posibilitaron descubrimientos como el de América, el redescubrimiento de los clásicos griegos, que hizo que la razón disputara el espacio a la fe, el calvinismo que señaló que el dinero era agradable a Dios, la imprenta que permitió una rápida comunicación y difusión de las ideas…  hoy también hay cambios que están ayudando a disolver el orden del capital, así han aparecido nuevas armas (la bomba atómica…), nuevas energías (nuclear,…), nuevas formas de comunicación (internet, redes sociales,…), una nueva cosmovisión que redescubre el valor y la importancia de lo pequeño, que frente a lo macro pone el acento en lo micro, en lo nano, por ejemplo la nanociencia…
Sampedro considera que esos cambios en la ciencia son fundamentales y que han emprendido un camino, en particular las ciencias naturales y biológicas, que nos van acercando al amor por las cosas pequeñas y por ese camino nos acercan al amor a la vida. Ese es para él el referente total de un nuevo paradigma, el referente que permitirá construir un nuevo orden y que ve presente en los jóvenes indignados y sus movilizaciones.
Amor a la vida que nos llevará a amar la vida propia de cada uno, no en vano somos seres inacabados que tenemos que hacernos, y para ello necesitamos libertad de pensamiento; es necesario pensar en libertad para poder construir y vivir la propia vida, de lo contrario nos convertimos en marionetas o esclavos de los otros, de los poderosos. Ese es el camino que vislumbra y al que apuntan los cambios, un camino que sólo es posible recorrer desde la libertad. 
 El discurso como tal comienza a partir de minuto 6,20
 

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